Diálogo con Santiago Creuheras, subsecretario de Gestión Ambiental y Sustentabilidad Energética de Puebla

06 septiembre, 2020

Concluyó el proceso de elecciones para los cargos en los órganos de gobierno de la Universidad de Harvard y Santiago Creuheras tuvo el privilegio de ser electo como director en el Consejo Directivo de la prestigiada Universidad de Harvard a través de la asociación de exalumnos. Actualmente es subsecretario de Gestión Ambiental y Sustentabilidad Energética en la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial, en el gobierno del estado de Puebla.

En días pasados visitó la Fundación Educación por la Experiencia para platicar sobre su participación en la Universidad de Harvard y dialogar sobre el Modelo Educativo ExE.

1 ¿Cuál es el cúmulo de logros para llegar a este momento de su carrera?

Esto es un reconocimiento a la actividad tanto personal como profesional de los exalumnos. Yo tuve la fortuna de graduarme en la Universidad de Harvard en 2001 de un par de posgrados y me he mantenido muy cercano a toda la actividad con los exalumnos promoviendo el desarrollo de capacidades de liderazgo, promoviendo posibles oportunidades para los recién egresados, trabajando también en los procesos de admisión para que más estudiantes puedan asistir a estudiar allá.

Una de las áreas en las que me he enfocado más durante este período tiene que ver con el acceso a las minorías a nuestra universidad, me he enfocado mucho en la parte de justicia social, en la parte de estudios étnicos y sustentabilidad, con la meta de que muchas de las personas que a lo mejor a veces se quedan fuera, tengan la oportunidad de entrar.

La Universidad de Harvard pareciera inalcanzable y realmente no lo es.  Lo único es cumplir con los requisitos que se tienen establecidos y tratar que más personas de países a América Latina, de los países asiáticos, de Europa y África, puedan realmente tener la oportunidad de estudiar ahí.

2 ¿Cómo combinará este cargo con su actual desempeño en el gobierno estatal?

Realmente esta actividad es como la mayoría de las posiciones de los consejeros en los consejos de alto nivel. Uno tiene una serie de participaciones en diversos comités que se van a ir integrando en las próximas semanas. En ellos hay que hacer labor de escritorio, ahora la misma situación de la pandemia nos obliga a hacer mucho de este trabajo a distancia, a tener reuniones vía videoconferencia. Hay que adaptarse a las nuevas circunstancias.

En condiciones normales tendría que viajar en varias ocasiones, generalmente muchas de estas reuniones se celebran en fines de semana y muchas otras no coinciden con el horario de trabajo que tenemos en nuestro país. De hecho, en una de las reuniones que tuve esta semana con los equipos de Asia del Este y del Sur de Asia, hay una diferencia de trece horas, entonces la reunión fue entre una y dos de la mañana.

La realidad es que se va uno adaptando. Todas las personas que estamos participando en estos consejos tenemos una agenda bastante completa durante el día y el tiempo que tenemos el honor de ceder, generalmente es hacía los fines de semana o fuera de los horarios laborales.

3 ¿Cómo está la participación mexicana en el Consejo Directivo de la Universidad de Harvard?

Fui la primera persona de América Latina, de México y por supuesto de Puebla que participa en este consejo en el periodo de existencia de la universidad, en los últimos 400 años no había entrado ningún México o latinoamericano en general. En la elección de este año participaron más de 45 mil personas, hay un comité que se encarga de nominar a los posibles candidatos y de estos se seleccionan a mil prospectos.

Analizan la trayectoria personal, profesional y de relación con la universidad desde que te graduaste. De estos mil se reduce a 200, luego a 100, 30 y nueve. De estos nueve competimos en la elección final, pero ya simplemente estar nominado para participar es un verdadero privilegio porque eres de los nueve considerados dentro de una población de exalumnos muy grande y tuve el privilegio de ser uno de los seis selectos para el periodo de los próximos tres años.

4 ¿Cuál es su compromiso con esta primera representación mexicana?

He tratado de construir ese puente incluso desde antes y es parte del reconocimiento que me han dado y lo seguiré fortaleciendo. Creo que cada vez debe haber más estudiantes tanto de nuestro país como de las minorías, que puedan acceder a esta universidad. También una oportunidad muy relevante y que se tiene que tomar en cuenta es la de promover vínculos entre las universidades de nuestro país con la Universidad de Harvard para hacer proyectos conjuntos.

También en el caso específico de Puebla he comentado que uno de los proyectos ambientales más importantes es el saneamiento del Río Atoyac. Hace más de 30 años estamos logrando que esto suceda, hay 22 municipios comprometidos con este problema y por instrucciones del mismo gobernador, de la secretaria de Medio Ambiente, hemos estado trabajando en consolidad una estrategia que nos permita colaborar de manera conjunta y que mejor que en su momento esto se le pueda presentar a uno de los expertos de la Universidad de Harvard para que nos asesore y nos acompañe en la implementación de esta política pública.

5 ¿Qué opina del modelo educativo de la Fundación ExE®?

Da gusto escuchar este tipo de cosas, tienen toda la alineación completa con el equipo del medio ambiente y me encantó esta propuesta de educación ambiental que está desarrollando. No estoy en el sector educativo como tal, realmente mi participación es más en la educación a nivel superior y este proyecto de ExE® que me parece sumamente interesante y positivo está enfocado a una población de educación básica, pero con mucho gusto lo impulsaré en las posibilidades que estén a mi alcance.

Esta educación en ética y valores es muy importante para el futuro de México y el mundo. Aún más en esta etapa en donde las circunstancias nos han obligado a un confinamiento; sabemos que conforme va evolucionando y avanzando esta pandemia, uno de los problemas grandes que se presentará en las siguientes fases es el relacionado con la salud mental.

Y para tener salud mental necesitamos realmente conocer nuestros valores, fortalecer nuestra capacidad de desarrollo ético y nuestra capacidad de responsabilidad social. Este modelo permite que esto pueda avanzar y lo digo de manera personal por lo que pude ver del proyecto y el reconocimiento que se tiene ya por parte de la Naciones Unidas, sin ser un experto en educación.